Gonzalo es un joven fotógrafo de treinta y dos años que decide mudarse de Madrid a un pequeño pueblo de Aquitania, Francia, junto con su amigo de infancia Juanma, donde compartirán una casa de alquiler. Lo que parece el comienzo de una nueva etapa de su vida será en realidad un giro radical a su existencia.
Dotado de un don especial desde que nació, Gonzalo es capaz de leer las mentes de las personas que le rodean, de saber qué es lo que piensan y cómo se sienten física y psíquicamente; don que sin duda le ha marcado desde su niñez y que con el tiempo, lejos de ser una virtud, se convierte en el lastre de un ser solitario que guarda su secreto con celo, hasta ese primer invierno de convivencia con su amigo, en el que día a día le cuenta esa parte de su historia que aún no conoce.
Después de descubrir la sorprendente habilidad de Gonzalo, Juanma lo convence para indagar sobre una extraña desaparición ocurrida en la aldea. Los dos amigos y una muchacha del lugar, confiando en el don de nuestro protagonista, se verán atrapados en una investigación inesperada.
Una novela con altas dosis de intriga, sorprendente y conmovedora.