¿Cuántas veces nos arrepentimos por algo que dijimos o hicimos? ¿Cuántas veces vamos por la vida con mala cara sin siquiera saber qué es lo que nos tiene tan atribulados? ¿Podemos evitar que esto nos ocurra?
La respuesta es sí. Y la explicación viene dada por las neurociencias.
Durante siglos, la creencia generalizada fue que las emociones residían en el corazón.
Los poetas y dramaturgos alimentaron esta noción y llenaron sus textos de protagonistas con el corazón roto de tristeza, de Cupidos que disparaban sus flechas hacia los corazones para establecer vínculos de amor y de doncellas cuyos corazones estallaban de alegría ante la mera proximidad del príncipe azul amado.
El manejo de las emociones, por lo tanto, es fundamental para tener una vida más plena y lograr un mejor rendimiento en el trabajo, en los estudios y en las relaciones con los demás.
Evitar las reacciones en caliente, sentir empatía por nuestro entorno, resignificar las experiencias vividas… Todo eso hoy, sabemos, es posible.
A lo largo de este libro se ofrecen decenas de ejercicios y recomendaciones, desde técnicas milenarias como la meditación hasta prácticas de última generación producto de la investigación en neurociencias, para que todos podamos autoliderar nuestras emociones, resignificar nuestras experiencias y, en definitiva, ser más felices.