Luchar por la calle

El principio fundamental del tráfico —ya centenario e ignorado por los responsables de planificar el transporte durante un siglo— dice que conseguirás un resultado acorde con lo que hayas construido. Construir más carriles de circulación solo genera más tráfico.

No bastaba con cobrar un peaje para inducir a la gente a modificar su manera de desplazarse. Las ciudades tenían que ofrecer nuevas alternativas de transporte más fiables. La tarificación por congestión podría proporcionarles los recursos para ello.

La planificación urbana integral es un ejercicio rentable en sí mismo. El PlaNYC redefinió la concepción de la ciudad y desterró la idea de que las ciudades en general (no solo Nueva York) son casos perdidos desde el punto de vista medioambiental, social y económico.

modelo para el transporte público y de tracción humana. Un 6 por ciento de la población se desplaza en bicicleta para ir al trabajo,[60] la cifra que más se aproxima a la de Copenhague entre las ciudades estadounidenses de más de medio millón de habitantes,[61] pese a resultar ridícula en comparación con los niveles europeos, aun teniendo en cuenta que esos trayectos representan solo una pequeña parte de todos los desplazamientos en bicicleta.

Pero en Portland ha ocurrido algo más: la ciudad se ha convertido en un mode

Una de las primeras estrategias de planificación urbana de Estados Unidos se implantó en Oregón hace más de cuarenta años y ha sido un magnífico modelo y un éxito impresionante

centros comerciales y sistemas poco eficientes de calefacción, ventilación, aire acondicionado y alcantarillado que necesitarán para poder vivir allí.

Unas ciudades más densas y más funcionales reducirán la huida al campo de la población con sus coches y las carreteras, aparcamientos, cen

Después de ensalzar durante años las virtudes de unos bosques impolutos, los ambientalistas modernos han cambiado el tono de sus mensajes sobre la ciudad. En vez de luchar por la protección del búho manchado en los bosques, han trasladado su lucha a las urbes y abogan por un desarrollo urbano inteligente o compacto como parte de una estrategia contra la dispersión.

suburbios y exurbios no solo obligan a recorrer a diario grandes distancias en coche para acudir al trabajo, sino que también es forzoso utilizarlo para cualquier desplazamiento, por banal que sea. En muchos suburbios, las normas urbanísticas limitan la construcción de espacios comerciales y de oficinas a determinadas zonas segregadas, de modo que las comunidades residenciales quedan a una distancia difícil de cubrir a pie si se desea desarrollar cualquier actividad. Las visitas médicas, las salidas para cenar fuera, acompañar a los niños a la escuela y recogerlos requieren anualmente miles de desplazamientos en coche que en una ciudad podrían hacerse a pie o en transporte público, camino del trabajo o al regresar al final de la jor