Condenado a la seriedad y a la impostura, Julio, el silencioso protagonista de Bonsái — la novela que supuso el brillante debut narrativo de Alejandro Zambra— acaba convenciéndose de que es mejor encerrarse en su cuarto a observar el crecimiento de un bonsái que vagar por los incómodos caminos de la literatura. En La vida privada de los árboles, segunda novela del autor, Verónica se demora inexplicablemente y el libro sigue hasta que ella regrese o hasta que Julián esté seguro de que ya no volverá. ¿Por qué leer y escribir libros en un mundo a punto de quebrarse? Esta pregunta ronda las dos obras de Alejandro Zambra que reunimos en este volumen, puerta de entrada a uno de los escritores más interesantes de las últimas generaciones.