En medio de la luminosa noche estival sueca, un auto cae de la carretera hacia el precipicio. Su conductor arde en un infierno particular.
Casi de inmediato, se descarta que haya sido un accidente; las huellas de otro vehículo señalan que el coche fue empujado antes de caer al vacío. Sin embargo, en la vida intachable de la víctima, el afamado obstetra y ginecólogo Malte Metzgen, no hay lugar para sospechosos. Pero todos lo son: el hermano ensombrecido por la figura del doctor, la cuñada mantenida, la mujer despechada, la secretaria eternamente enamorada.
En un escenario en el que nadie es quien dice ser, Greta será la encargada de correr los velos de cada uno. Fiel a su estilo, convencerá al teniente Stevic de las teorías más descabelladas; actuará a espaldas de su padre, el inspector Lindberg; y encontrará tiempo para llevar adelante su librería especializada en novelas policiales y el renombrado Club de Lectura.
Lena Svensson nos trae otra trama perfecta para Greta Lindberg: sagaz, irreverente, llena de guiños a otros autores de misterio. Una trama que transita el sutil borde entre la serenidad de un ángel y la eclosión del infierno.