Miedo, locura, muerte. Pasiones que ligan al hombre con su pasado y que determinan su relación con el presente.
El miedo, esa angustia provocada por algo incierto o amenazante, lo desconocido, que altera el aquí y el ahora. Siempre subyace en él la amenaza de la muerte, esa eterna exiliada que el hombre busca y rechaza en todo lo que hace. Ambos, miedo y muerte, son incontrolables para el ser humano
y son resistentes a toda lógica o razón.
Lo llevan, innegablemente, a los umbrales de la locura.
Adriana Lucero