Paulina se divierte, ríe, juega, ensaya morisquetas, hace las compras, ordena la casa y la heladera, cuida a sus hijos, investiga, inventa, escribe recetas, prueba. Paulina cocina. Y un día, casi sin darse cuenta, encendió una cámara para mostrarnos lo que hace. Muchos se entusiasmaron con sus videos y encontraron en sus recetas una forma sencilla y divertida de cocinar. ¡Y ahora cientos de miles de fans la siguen en las redes sociales!