No lloré con el final, pero si me transmitió mucho sentimiento, a pesar de que de algún modo se veía venir lo que ocurriría. Aplaudo a las autoras el haber podido coordinar y hacer calzar los engranajes de una historia con tantas aristas.
Este es el libro más largo que he leído este año, y sin duda valió la pena.
Me atrapó desde el primer momento. Es una novela que hace que te sumergas en otro mundo y te olvides de tus problemas por un momento. ¡Me encantó! Pude imaginar cada situación, personaje y escena. ¡Excelente trabajo!
Al principio puede que todo te deje tipo OH DIOS ¿QUÉ ESTA PASANDO?, sin embargo la historia narra lo que sabemos que debe suceder, la presión que nuestros idols sufren ya sea, por un sassaeng, por su empresa, por la prensa, o por la sociedad. El mensaje que me llegó a mi es que siempre hay un ser humano detrás, como todos, con problemas, es una muy bonita historia por ese lado.