Hace casi quinientos años que Hernán Cortés conquistó Tenochtitlán junto a unos cientos de españoles y miles de tlaxcaltecas sometidos por Moctezuma.
Los hechos que llevaron al de Medellín a convertirse en un personaje de talla histórica han venido acompañados de componentes míticos procedentes tanto de aquel mundo indígena que él transformó trascendentalmente como de ese Viejo Mundo al que pertenecía.
En El mito de Cortés se aborda la figura del conquistador español desde las visiones que de él se han tenido a lo largo de los siglos, empezando por las de sus contemporáneos y llegando hasta las de nuestro presente, al tiempo que se repasan los principales mitos que gravitan en torno a su persona. En la obra se analizan las relaciones de la figura de Hernán Cortés con las de Quetzalcóatl o Alejandro Magno, y también su condición de conquistador y de evangelizador del Nuevo Mundo que contribuyó a civilizar.
El Cortés que emerge del libro no es únicamente un hombre armado con la espada y la cruz, su despliegue por la América en la que quiso morir puso las bases de lo que hoy une a cientos de millones de hombres de ambos hemisferios: la Hispanidad.