Los cuentos de hadas no son sólo para niños, como sabe cualquiera que haya leído a J.R.R. Tolkien. En el ensayo Sobre los cuentos de hadas, Tolkien describe la naturaleza de los cuentos y relatos fantásticos y discute las opiniones de los académicos y de aquellos que los relegan al dominio de la juvenilia; el libro incluye uno de los primeros cuentos de Tolkien, Hoja de Niggle. Escritas en el período (1938–1939) en que El Señor de los Anillos empezaba a desarrollarse, estas dos obras muestran la maestría y la inteligencia de Tolkien en el arte de la sub-creación, el poder de dar a la fantasía la interna consistencia de la realidad. En esta nueva edición se publica por vez primera el poema Mitopoeia (el hacedor de mitos), en el que el autor Filomito; amador de mitos, confunde las opiniones de Misomito, enemigo de mitos.