El término “populismo” ha estado envuelto, desde siempre, en una gran polémica. Sus manifestaciones políticas han sido estigmatizadas por las diferentes potencias mundiales, que se saben ante un adversario con la suficiente fuerza para revertir el sentido común de época. América Latina se ha convertido en un laboratorio político de futuro donde se dirimen dos fuerzas históricas. Por un lado, diferentes formas de vida posdemocrática para el capitalismo que viene y, por otra, una nueva imaginación política para la emancipación. Son numerosas las situaciones reaccionarias que han ido ganando terreno, a nivel global, durante los últimos años. El panorama actual solo contribuyó a acentuar una crisis que venía gestándose desde hace algún tiempo.
En este escenario, se exige asumir una serie de problemáticas no contempladas en los debates clásicos de la teoría populista. De esta necesidad nace el presente texto. La apuesta de las autoras consiste en averiguar qué hay de universalizable en los problemas, desafíos y respuestas que ofrece un lugar de enunciación como el continente americano.
Este libro analiza el populismo como una forma de pensamiento que se inserta en los debates filosóficos y políticos actuales. En este escrito, declaradamente militante, las autoras asumen su posición política como una forma de hacerse responsables de su propia implicación teórico-subjetiva.