Luke Adams es un agente de policía a punto de cumplir cuarenta años, está divorciado y lleva un estilo de vida más o menos organizado que no se plantea cambiar. Sin embargo, tiene una fantasía pendiente: seducir de una vez por todas a Dora, una rubia esquiva y descarada que lleva rechazándolo demasiado tiempo.
Pero mientras aguarda a que ella caiga rendida a sus encantos, el comportamiento de Luke está lejos de ser el de un monje… Se entretiene con amigas dispuestas a pasar un buen rato, y a las que siempre deja muy claro que no han de esperar nada más de él, porque tarde o temprano su deseo se hará realidad.