Basándose en la mundialmente conocida tradición legendaria de héroes justicieros como Robin Hood, Walter Scott urdió la trama de Ivanhoe, situándola precisamente en el período histórico de Inglaterra en que más se manifestó la pugna entre normandos y sajones: la época en que, ausente Ricardo Corazón de León en Palestina con motivo de la tercera cruzada, su hermano Juan sin Tierra intentó usurparle el trono con la ayuda de Felipe Augusto de Francia y el apoyo de los normandos. La peligrosa y audaz tarea del protagonista, el caballero Ivanhoe, será la de permanecer fiel a su legítimo rey e intentar, con la colaboración de sus valientes compañeros sajones, el feliz retorno a su patria de Ricardo I de Inglaterra.