Se daba perfecta cuenta cuando atraía la mirada de algún chico, y se regocijaba con la atención. Sabía cuando le coqueteaban y, cuando le daba la gana, ella coqueteaba también, aventurera, llena de curiosidad, lista para dar el salto fuera de las manos de la infancia. Ella sabía bien que le gustaba a los chicos, que la deseaban incluso.