El erotismo significa no solo estar en sí mismo, vivirse plenamente, sino
también estar en el otro y en lo otro y ser en el otro y en lo otro. En tanto
potenciemos cada instante de nuestro estar en el mundo desde su perspectiva
erótica, seremos más humanos, más solidarios y más libres.
Iluminada por la luz de su propia memoria, Arabella Salaverry nos construye la
trayectoria de su particular erotikón, que no es otra cosa que la suma de sus
percepciones como mujer, como poeta, como ser humano.