Dice la profecía que el príncipe elfo deberá ser desvirgado la noche de su centenario, cuando se alineen en el cielo las dos lunas llenas dibujando una corona roja alrededor de un círculo azul. En ese momento exacto el príncipe deberá concebir a su primera hija, que será la elegida para reunificar y gobernar los cinco reinos élficos, acabando con las guerras, con el hambre y la miseria. Sus novecientos años de vida serán los más prósperos y felices que ningún elfo haya conocido jamás.
La Reina Verde ha organizado un torneo, cuya ganadora se casará con el príncipe elfo y será la encargada de desvirgarlo para hacer realidad la profecía.
Elwing, una cazarrecompensas, se enfrentará a las damas de la nobleza para conseguir ser reina. Lo que no entraba en sus planes era enamorarse de una de ellas.
«Es un libro que se lee perfectamente en una tarde, además de que la pluma es amena. Tiene las descripciones justas y no se anda por las ramas. Pero lo que más me ha gustado es que me pensaba una cosa y al final era otra». (Blog «Corazón, tinta y papel»).