«Los funerales de la mamá Grande», el primer libro de cuentos de Gabriel García Márquez, continúa la historia de macondo iniciada en “La Hojarasca” y que alcanza su culminación y fin en «Cien años de soledad”. En estos relatos el paisaje psíquico de Macondo se confunde con el humor d elos habitantes y con la sucesión de malestares, penas y prodigios. Rebeca Buendía, la viuda de José Arcadio, vive en una casa inmensa de dos corredores y nueve alcobas, padeciendo de delirios y visiones; el padre Ángel duerme desde hace años en el confesionario; el dentista tortura a los opositores; el telegrafista transmite poemas de amor a una colega desconocida; Trinidad, un adolescente, colecciona ratones muertos en cajas de zapatos. En Macondo sólo prosperan las pestes, los adivinos, los saltimbanquis y los encantadores de serpientes.