Buscando un libro para regalar a un pequeño que anda atravesando el fin de la infancia, di con este libro. Como siempre, un placer leer a Antonio Malpica, una historia profunda, contada por personajes tan cotidianos como nosotros mismos. Todo momento es una promesa, este libro es una promesa.
“... la vida, como la conocemos, es una falacia, y la búsqueda de la felicidad tiene que iniciarse poniendo la vista en horizontes muy distintos a los acostumbrados.”
Mario es un niño muy observador, tiene 11 años y vive con sus papás en una casa en donde no le falta nada, ¡hasta chofer tiene y le dicen Torreblanca! En su camino a la escuela siempre ve a un sonriente limpiaparabrisas, por lo que Mario ha decidido averiguar que lo hace tan feliz.
Un libro sencillo y muy emotivo que nos habla sobre la felicidad y lo que es realmente importante. El hecho de que la historia esté contada por el abuelo le da un plus mágico y conmovedor al relato.