La novela sigue a Clarissa Dalloway a través de un solo día en Inglaterra después de la Gran Guerra en una narrativa de estilo de flujo de consciencia. Construida a través de dos pequeñas historias que Woolf había escrito previamente ('La señora Dalloway en Bond Street' y su inconclusa 'El Primer Ministro') la historia de la novela son los preparativos de Clarissa para una fiesta que va a ofrecer esa noche. Usando la perspectiva interior de la novela, Woolf se mueve hacia atrás y adelante en el tiempo, y dentro y fuera de la mente de varios personajes para construir una imagen completa, no solo de la vida de Clarissa, sino de la estructura social de entreguerras. Debido a similaridades estructurales y estilísticas, comúnmente se cree que 'La señora Dalloway' es una respuesta al 'Ulises' de James Joyce, un texto que es admirado como una de las grandes novelas del siglo XX, algo que Woolf anticipó, elogiando la obra en su ensayo 'Modern Fiction'. Sin embargo la Hogarth Press, administrada por ella y su esposo Leonard, no pudo publicar el 'Ulises' en Inglaterra debido, entre otras causas, a las restricciones de uso de lenguaje obsceno que regían en Inglaterra en la época. Fundamentalmente, sin embargo, 'La señora Dalloway' explora en nuevos terrenos y busca presentar un aspecto diferente de la experiencia humana.