Gestiona la ansiedad

El estrés y la ansiedad están relacionados, pero no son sinónimos. Ambos son respuestas adaptativas normales a los retos de la vida —el trabajo, las relaciones o la mortalidad, por mencionar solo algunos— y comparten muchos síntomas, como la preocupación, los dolores de estómago, el nerviosismo, la tensión muscular, los pensamientos acelerados, las jaquecas, las noches de insomnio o todas las anteriores.1

Stephen Porges llama «nuestro imperativo biológico hacia la seguridad». La incomodidad que nos provoca fue diseñada para alertarnos de algo, con el objetivo de que estemos atentos y nos protejamos

-Dodson en psicología propone q

el psicólogo Stephen Porges llama «nuestro imperativo biológico hacia la seguridad». La incomodidad que nos provoca fue diseñada para alertarnos de algo, con el objetivo de que estemos atentos y nos protejamos

Stephen Porges llama «nuestro imperativo biológico hacia la seguridad»

desencadenar un bucle de temor, preocupación y autocrítica.

respuesta a una situación estresante

pensamientos excesivos: juicios sobre el pasado, preocupaciones sobre el futuro y otros tantos.

provocar distintos problemas de salud física y mental,

Aunque el estrés quizá no sea muy agradable en el momento, puede ser útil para incitarnos a estar alerta y actuar cuando es necesario.