Permite que todos discutan todo, menos tus actos. Dales la impresión de que te agrada, y por eso la estimulas, la libertad de las ideas. No limites lo que llamamos La Libertad, pero nunca dejes de moderarla, pues hay quienes suponen, ilusos, que no tiene límites… La política, eso lo sabes ya, es algo sagrado… Cuida que los de fuera no metan mano en ella… Demuestra desde el principio que tu Gobierno tiene carácter, perfil, decisión, línea… Un presidente sin mano dura invita al desorden y a que se le falte al respeto… Si eres blando con él, este pueblo nuestro terminará desbocándose, relajándose, destruyéndose a sí mismo… Ten presente que prefiere tener a un dictador y no a un franciscano en Palacio… A quienes te han servido bien, págales lo más que puedas; tenlos contentos, dales cosas que no quieran perder si caen de tu gracia… De tiempo en tiempo pónlos a temblar con un malhumor tuyo… Que no se sientan demasiado seguros, nunca… No serán todos, quizá, tan leales como quisieras, pero los mantendrás alineados junto a ti…