Stephanie Garber

Érase una vez un corazón roto

Notify me when the book’s added
To read this book, upload an EPUB or FB2 file to Bookmate. How do I upload a book?
  • Hopeday2020has quoted4 months ago
    Pero la duda era como la sal: no se necesitaba demasiada para alterar el gusto de los pensamientos.
  • Cosette Vázquezhas quoted4 months ago
    Mantener la esperanza era un acto de valentía.
  • Quetza Mendezhas quotedlast year
    «Todos los cuentos contienen una parte de verdad y una de mentira —solía decir su madre—. Lo que importa es lo que nosotros creemos que son».
  • Dan RShas quotedlast year
    —Tienes mucha suerte de que yo esté aquí —gruñó.

    —La suerte no tiene nada que ver con esto —murmuró Jacks—. Yo quería que estuvieras aquí, Pequeño Zorrillo. ¿Quiénes crees que le pidió a Veneno que te salvara y que sugiriera a su emperatriz que te enviara a la Nocte Eterna?
  • Dan RShas quotedlast year
    Ni siquiera te gusto.

    —Ahora mismo me gustas. Me gustas un montón. —Succionó su piel con suavidad—. De hecho, no se me ocurre nada que me guste más
  • Minminhas quoted3 days ago
    ¿O ya has olvidado que el mal de amores te rasga el alma, que te convierte en masoquista y hace que anheles lo que te eviscera hasta que no queda nada de ti que pueda ser destruido?
  • Minminhas quoted3 days ago
    —La reconocerás porque estará coronada en oro rosa —recitó la mujer—. Será sierva y princesa.
  • Minminhas quoted3 days ago
    Ella quería ser el gran amor de alguien, no su maldición.
  • Havenflyhas quoted3 days ago
    Y entonces, como si él no fuera también un monstruo, le pasó un brazo bajo la capa para agarrarla por la cintura, sosteniéndola posesivamente mientras decía:

    —Deja de mostrar los colmillos. Yo soy el único que va a morderla.

    Jacks le mordisqueó la oreja, frío y brusco.
  • Minminhas quoted7 days ago
    Pero la duda era como la sal: no se necesitaba demasiada para alterar el gusto de los pensamientos.
fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)