Los poemas de Avenida de Mayo impactan por «la creación de una poesía del lazo que va anudando, cosiendo, las palabras a las cosas, aunque sea por un breve instante, sacándolas de su muda indiferencia.» (entre comillas: fragmento del prólogo escrito por Alberto Rodriguez Maiztegui)
En Avenida de Mayo, la poesía se despliega como una investigación en torno a algo que rodea lo que hay y que es, propiamente hablando, lo que no está, o lo que está sin estar: hálito, aliento, aire o psique, ese algo circula entre los cuerpos, entre los seres, y les da no un aura, pero tal vez un borde que permite, efímeramente, retratarlos en poema. Y al mismo tiempo, eso es intangible, es indiscernible, es imposible de localizar. De allí el movimiento circular de algunos poemas y su aire casi melancólico. (Anahí Mallol en Revista Otra Parte)