La gente que no entiende a Iron Maiden no comprenderá el impacto que ha tenido en las vidas de tantas personas. Maiden ha representado una afirmación personal de autoestima para millones de personas a lo largo de los años. Por encima y más allá de la música pop, la moda y los residuos y la inútil decadencia de la celebridad del «reality», Maiden era trabajo duro y tangible, sustantivo y complejo, pero también visceral y agresivo.