ME ENCANTÓ.
El único "pero" que le encuentro es que tiene un par de momentos que me incomodaron por cómo el personaje de Kafka ve a la niña, no sé si estoy exagerando, pero se me hizo medio creepy. Fuera de eso, la creatividad de Jordi Sierra i Fabra me voló la cabeza.
Qué encantadora historia! Nunca hubiera imaginado a Franz Kafka de esa manera, con tanta ternura. Me pareció atrevido y muy atinado que Sierra i Fabra haya mostrado al gran escritor como uno de sus personajes, mostrando una faceta distinta a la que los lectores conúnmente tenemos del autor de La metamorfosis, además de darle vida a las míticas cartas de Brígida. Un aspecto de la vida de Kafka que yo desconocía y que me ha encantado, cambiando mi perspectiva sobre él.
Muy recomendable.