A partir de desplazamiento físicos, la observación y el visionado de antiguas películas, los poemas de este libro descubren nuevos mundos entre el presente y el pasado, al develar no sólo eventos históricos, memorias personales o su carácter de basural del recuerdo. Los poemas de Germán Carrasco también sugieren aquello que escapa a la casualidad, activando sensaciones espectrales y anacrónicas. Tanto el territorio y el texto poético, es quien hace girar un caleidoscopio donde las imágenes -visuales o literarias— reactivan sus efectos y afectos en el ahora.