Estos cuentos de José Miguel Tomasena dan cuenta del lado sombrío de la vida común, de esas crisis que le sobrevienen a cada cual al abrir los ojos en la mañana y enfrentarse consigo mismo. Crisis en la pareja, en la familia, en el barrio, en el mundo y en la escritura misma. Y también violencia, una violencia ciega que nos arrasa, a veces de modo sanguinario y otras a fuerza de aislamiento y silencio, y que la frágil materia de la literatura nos permite, apenas, capotear.
Con un lenguaje franco, pulido hasta el hueso, y un pulso narrativo que nunca tiembla, Tomasena ofrece una colección de historias ásperas, mordaces, de las que nadie sale indemne.
—Antonio Ortuño