Las máximas de Ptahhotep pertenecen a los llamados Textos de las pirámides, y se encontraron milagrosamente íntegras en el papiro Prisse, descubierto en el siglo XIX. Su intención era servir de consejo y guía para su hijo, Ankhu, que siguió sus pasos y fue visir. La colección de máximas la escribió su nieto Ptahhotep Tshefi, quien en las primeras líneas atribuye la autoría a Ptahhotep. Este libro, considerado el más antiguo del mundo, es de una asombrosa modernidad. En un lenguaje simple y directo, el viejo sabio habla de la humanidad, del arte de gobernar, de las vanidades humanas, de la amistad, de la justicia, de la ignorancia y el conocimiento.