La música, Dorel, bien te lo he repetido, nació en el casamiento de una bruja —María Petra habló con voz de contar leyendas—. Parecer ser que una bruja fue invitada al casamiento de una de sus primas. Llegó, disfrutó del banquete. Pero cuando fue la hora de los obsequios, notó que no tenía nada que ofrecerle a la novia. Entonces, concibió la idea de abrir su boca, deforme y dientuda, y tararear. Así nació la música, Dorel. ¡Y bien hiciste en olvidarla!