Historia del pensamiento político en el siglo XX

Bujarin insistía en que formalmente el Estado soviético tendría que copiar el centralismo autoritario del Estado imperialista, sobre todo en lo referente al control y dirección de la economía.

Entre 1920 y 1921, Trotsky insistía en que la militarización de las fuerzas de trabajo y del Estado era la única manera de reformar a unos trabajadores recalcitrantes y a una economía dislocada para lograr la meta fundamental del socialismo: la maximización de la producción

La industria es indispensable, la democracia no» (Lenin

A las nacionalizaciones desde abajo siguió un fuerte rechazo a todo lo burgués, incluidas la formación y la especialización. Se consideraba enemigos del pueblo a los spetsii y a los hombres con gafas, a cualquiera que tuviera una educación, a todas las figuras de autoridad.

el eslogan bolchevique en contra de la autoridad de jefes y empleadores que acabó siendo imposible crear o justificar la existencia de autoridad misma, lo que dificultaba enormemente la vida administrativa, social y económica del país.

La distopía del poder arbitrario, el terror y la extinción de la sociedad civil y el individuo autónomo surgió del abismo entre las aspiraciones ilimitadas de la elite gobernante y la maleabilidad finita de las personas y las cosas.

sobre la forma de crear un partido, ¿Qué hacer? (Lenin, 1960-1970, vol. V). La mayoría cree que es ahí donde Lenin rechaza por primera vez que el proletariado sea el portador del socialismo y propone sustituirlo por un partido disciplinado compuesto por revolucionarios conscientes.

sobre la forma de crear un partido, ¿Qué hacer? (Lenin, 1960-1970, vol. V). La mayoría cree que es ahí donde Lenin rechaza por primera vez que el proletariado sea el portador del socialismo y propone sustituirlo por un partido disciplinado compuesto por revolucionarios conscientes.

No siempre se trata de que se invierta demasiado o demasiado poco, sino de que el dinero sirve para satisfacer intereses personales que sólo comparten ciertos sectores sociales (Goodin, 1982) y no se invierte en lo que realmente es de interés público y beneficiaría a toda la comunidad.

la Unión Soviética, al igual que la Alemania nazi, era un régimen «burocrático colectivista» liderado por una nueva clase gobernante que monopoliza el poder político y económico.