Las Diosas Nunca Envejecen

nuestros cuerpos no están desconectados de nuestros pensamientos y emociones. No están desconectados del planeta Tierra, nuestra gran madre, ni del cielo y las estrellas.

empezamos a envejecer desde el instante en que nacemos. Pero en nuestro contexto cultural no empleamos el término «envejecimiento» hasta que alcanzamos los 50, aproximadamente, y casi todos asociamos «envejecimiento» con «deterioro»

Deja salir a la diosa que llevas dentro. Acógela, complácela, haz que se sienta a gusto. Poco a poco, empezará a asomar. Hasta que un día, muy pronto, te mirarás al espejo y una mujer totalmente nueva te devolverá la sonrisa.» Christiane Northrup