La mente humana es un complejo sistema en constante evolución. Como ocurre con otros sistemas en los que vivimos, posee estructuras que pueden servirnos o perjudicarnos en nuestra búsqueda del bienestar y de un entorno físico que potencie ese grado de satisfacción. Estas estructuras no actúan de manera aislada, sino interconectadas con otras de carácter social, emocional, físico y digital. Por lo tanto, para alcanzar objetivos, es clave prestar atención a cada una de estas áreas y trabajarlas en conjunto.
Demos forma, pues, a estructuras mentales positivas que nos ayuden a desarrollar fortalezas e impulsen nuestra capacidad de liderazgo. Abandonemos las que nos perjudican y nos impiden avanzar. Y, puesto que mente y cuerpo están íntimamente relacionados, trabajemos en entornos favorables, tanto internos como externos, que nos aporten un bienestar óptimo.
¡Identifícalos, conócelos, genéralos y aprovéchalos!