—Es algo que se hace en Japón —dijo por fin—, pero no de esta forma. La gente con irezumi, normalmente de la Yakuza...
—¿Irezumi? —preguntó Francis.
—Tatuajes de cuerpo entero. A veces, cuando muere un yakuza, da instrucciones para que desuellen su tatuaje y lo conserven. Hay algunos ejemplos expuestos en el museo de los tatuajes de Bunshin, en Yokohama. Y también hay una colección en la Universidad de Tokio.