En la Barcelona de 1979, en vísperas de las elecciones municipales, el detective privado Pepe Carvalho tiene que investigar las causas de un misterioso crimen. Un importante hombre de negocios llamado Stuart Pedrell aparece muerto a navajazos en un barrio extremo de la ciudad cuando desde hacía un año todo el mundo le suponía haciendo un viaje por la Polinesia. Carvalho averigua lo que hizo en el curso de este año, empieza a conocer la peculiar personalidad de la víctima -sus aficiones intelectuales y su obsesión por seguir los pasos de Gauguin e irse a los mares del Sur, que en la novela es un insistente símbolo de plenitud vital soñada e irrealizable— y va desenredando un complicado embrollo que tiene como fondo un sentimiento de frustración general. Desde la alta sociedad al inframundo de los suburbios, la novela traza un intenso cuadro de personajes y ambientes que refleja los conflictos personales y colectivos de la España de entonces. Premio Planeta 1979.