Si por mucho que pensemos las cosas obtenemos resultados angustiosos, y si aun consiguiendo el resultado esperado, este es aburrido o carece de belleza, lo rechazaremos. Si algo te agrada, aunque se haya hecho medio en broma, debes darle valor. El rococó se apoya en el individualismo extremo como fundamento, en tomar las decisiones en función de lo que uno mismo siente, «esto me gusta» o «esto no me gusta», sin tener en cuenta las opiniones y el esfuerzo de los demás