Primavera de 1808. Castilla sangra.
Cuando las tropas napoleónicas llegan prometiendo orden, solo siembran terror. Juan Martín Díez, un campesino castellano sin más armas que su hoz y su orgullo, presencia cómo su pueblo es humillado, saqueado y ejecutado. Esa noche, nace algo más que un hombre: nace una leyenda.
El Empecinado.
Sin entrenamiento. Sin rango. Sin permiso. Solo voluntad.
Mientras el Imperio extiende sus garras por la península, Juan Martín lidera una guerrilla salvaje compuesta por campesinos, curas con trabucos, mujeres espías y ancianos mineros que saben dónde colocar una carga de pólvora. Cada emboscada deja una cicatriz. Cada victoria tiene un precio.
Una novela brutal y conmovedora, tan tensa como lírica, donde la resistencia se mide más por las cicatrices que por las victorias.
Un retrato vívido y despiadado de la guerrilla española durante la ocupación napoleónica, con personajes que respiran, sudan y sangran en cada página.
Ideal para lectores de novela histórica, drama bélico y antihéroes inolvidables.