bookmate game
es
Books
Yoko Tawada

El emisario

  • Cristinahas quotedlast year
    Cuando Tomo se echó a sollozar como un niño pequeño, Mumei, que hasta entonces dormía plácidamente, también prorrumpió en llanto. La longitud de onda de ambas voces era idéntica, como la de dos hermanos que se pelean y se ponen a llorar a la vez cuando los regañan.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    De pequeño, pensaba que el objetivo principal de la medicina era conseguir la vida eterna, pero nunca había reflexionado sobre el dolor que podía llegar a causar el hecho de no morir.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    En lugar de eso, lo que le dolía era que los adultos hirieran constantemente a los jóvenes a sabiendas. Siempre hablando de si «esto está bueno» o si «esto está malo», arrogantes como gourmets de alto copete, olvidando que todos estamos inmersos hasta el cuello en un mar de problemas.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    No obstante, eso se debió también a otras razones: lavar la ropa en una lavandería era más económico que comprar una lavadora nueva cada tres años, y además se había extendido la nueva y extraña teoría de que mirar la máquina mientras daba vueltas hacía que la cabeza no las diera
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    Como ver la televisión engordaba, cada vez más personas se deshacían del televisor por cuestiones dietéticas.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    No obstante, eso se debió también a otras razones: lavar la ropa en una lavandería era más económico que comprar una lavadora nueva cada tres años, y además se había extendido la nueva y extraña teoría de que mirar la máquina mientras daba vueltas hacía que la cabeza no las diera.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    No obstante, eso se debió también a otras razones: lavar la ropa en una lavandería era más económico que comprar una lavadora nueva cada tres años, y además se había extendido la nueva y extraña teoría de que mirar la máquina mientras daba vueltas hacía que la cabeza no las diera.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    Como el nacimiento de niños suponía un problema, en el caso de las mujeres tenían preferencia las que eran mayores de cincuenta y cinco años, mientras que en el caso de los hombres los castrados tenían prioridad
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    De modo que se tomó la resolución de que las personas que quisieran ir a trabajar a granjas okinawenses debían hacer la solicitud como parejas casadas. Las mujeres solteras y las parejas homosexuales podían tramitar la solicitud sin más, pero a los hombres solteros no les estaba permitido.
  • Soliloquios Literarioshas quotedyesterday
    Tanto daba cómo comieran, el peligro acechaba en la fruta sí o sí. Cuando Mumei comía kiwi, le costaba respirar, y con el zumo de limón se le paralizaba la lengua. Pero no se trataba únicamente de la fruta. Cuando comía espinacas, tenía acidez, y las setas shiitake le mareaban. Mumei no podía olvidar ni por un instante que la comida era peligrosa
fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)