En la clínica Steen, un centro psiquiátrico para pacientes acaudalados que saben apreciar tanto los buenos cuidados médicos como la discreción, se produce el asesinato de la administradora. La señora Bolam, cuyo carácter reservado y el exceso de celo en su trabajo le habían hecho ganarse las antipatías del personal del centro, aparece muerta en el archivo de historiales clínicos, tumbada en el suelo, con un cincel clavado en el corazón con precisión quirúrgica, y una talla de madera perteneciente a uno de los enfermos entre los brazos. Adam Dalgliesh, será el encargado de recorrer el tortuoso laberinto de recelos, secretos, chantajes y otros misterios, en el que se hallan involucrados el personal y los pacientes, entre los que forzosamente se encuentra el asesino.