A las 11:05 p.m del uno de diciembre en Richmond, Virginia, el asesino Ronnie Joe Waddell es declarado oficialmente muerto en la silla eléctrica. En la morgue, la Doctora Kay Scarpetta espera el cuerpo de Waddell. Pero la muerte de Waddell no es el único acontecimiento de interés periodístico durante esa fría noche: el cuerpo de un muchacho herido de forma grotesca es encontrado apoyado contra un contenedor de basura. Dos casos aparentemente sin relación, hasta que Scarpetta recuerda que una de las víctimas de Waddell había sido hallado en una posición sorprendentemente similar…