En el plano de los derechos políticos, sociales o civiles, la ética y la ciudadanía exigen a las personas potenciar cierta cantidad de destrezas tanto personales como sociales que las capaciten para afrontar las contingencias que genera la vida. Por lo tanto, es importante reconocer que, frente a la ciudadanía, hay muchas tareas pendientes, amplios retos educativos y pedagógicos y, asimismo, una necesidad por parte de una población dispuesta a hacer cambios que posibiliten unas relaciones sociales equitativas, con espacios para la participación, la pluralidad y el compromiso social. Este texto, además de presentar un análisis de esas tensiones entre ética y ciudadanía, se acompaña de un selecto conjunto de acciones pedagógicas para implementar en el aula, que posibilitan el tránsito de la reflexión teórica a un actuar práctico que dé cuenta de ese saber en la vida cotidiana de los sujetos.