De todos los perros de defensa, el rottweiler es el más fuerte y, si se sabe educar y adiestrar, el más seguro. Mucha gente está convencida de que el rottweiler es un perro peligroso, que muerde con facilidad y que resulta difícil de controlar. Sin embargo, el perro «malvado» no existe: desde que nace, el hombre puede modificar su instinto, corrigiendo las conductas agresivas y combativas, y estableciendo una relación amistosa con él. Por ello, antes de adquirir un perro de estas características, deberíamos preguntarnos si seremos capaces de afrontar una responsabilidad tan grande. Para educar a un perro dominante como el rottweiler se necesita una cierta habilidad, unos conocimientos básicos y una sensibilidad particular: los consejos de estas páginas son indispensables para ello. Gracias a este manual, podremos aprender todo lo necesario para hacernos cargo de un rottweiler. Con sus explicaciones, precisas y claras, y el gran número de fotografías que lo ilustran, sabremos cómo obtener el mayor provecho posible de nuestro perro y conseguir, al mismo tiempo, que viva feliz.