Fragmentos de un discurso amoroso se publicó en Francia en 1977 y se convirtió rápida e inesperadamente en best-seller. Fue adaptado para teatro en las más importantes ciudades de Occidente (incluso en Buenos Aires) y es hoy uno de los grandes libros de culto de la literatura francesa del siglo XX. La primera edición, de 15 mil ejemplares, se agotó en dos semanas, y a finales de ese mismo año, las copias vendidas llegaron a los 80 mil ejemplares. El libro fue un éxito desde su aparición y despertó el máximo interés en la prensa masiva. Así, Barthes, más habituado a hablar en su círculo de pares del campo intelectual francés, se encontró, por ejemplo, dando una larga entrevista a la revista Playboy que lo había consagrado «hombre del mes». Poco antes de la publicación de este libro, Roland Barthes había sido nombrado profesor en el Collège de France —una prestigiosa distinción vitalicia que compartiría con pensadores como Michel Foucault, Paul Valéry o Emile Benveniste— a partir de su prolífica obra en el campo de la semiología. En 1980, antes de morir, Barthes declaró: «Alguna vez dije que Fragmentos… sería mi libro más leído y más rápidamente olvidado, porque es un libro que llegó a un público que no era el mío (…) No era un libro muy intelectual sino más bien bastante proyectivo, en el que uno puede proyectarse no a partir de una situación cultural sino a partir de una situación que es la situación amorosa».