Una pequeña parte de las hermanas creía que la Madre había ido en busca de su pretendiente, Galian Berethnet, y que había tenido una hija con él, dando origen a la Casa de Berethnet. Aquella idea, impopular en el Priorato, era la leyenda fundacional del primer Reino de las Virtudes, y lo que había hecho que Ead acabara en Inys.