El mundo de Sofía

Yo opino, como tú, que ella es muy afortunada. Pero a quien le toca la lotería de la vida también le toca la de la muerte. Pues la condición humana es la muerte.

Lo triste es que no sólo nos habituamos a la ley de la gravedad conforme vamos haciéndonos mayores. Al mismo tiempo, nos habituamos al mundo tal y como es.

Toma nota de esto!) La madre ha aprendido que los seres humanos no saben volar. Tomás no lo ha aprendido. Él sigue dudando de lo que se puede y no se puede hacer en este mundo

LO ÚNICO QUE NECESITAMOS PARA SER BUENOS FILÓSOFOS ES LA CAPACIDAD DE ASOMBRO.

La vida y la muerte eran como dos caras del mismo asunto.

Esta fuerte fe en la razón humana se llamaracionalismo. Un racionalista es el que tiene una gran fe en la razón de las personas como fuente de sus conocimientos sobre el mundo.

Hume señaló que nunca se debe partir de frases de «es» para llegar a frases de «debe».

También puede ser que el niño sea mejor filósofo. Porque el niño no tiene opiniones preestablecidas. Y eso, Sofía. es la mayor virtud de un filósofo. El niño percibe el mundo tal como es, sin añadir a las cosas más de lo que simplemente percibe.

Una de las misiones principales de los filósofos es la de advertir a la gente que no saque conclusiones demasiado precipitadamente.

Se dice que Hume contestó: «También es posible que un trozo de carbón puesto al fuego no arda».