Un hombre es aquello por lo que siente pasión. He descubierto que, si renuncias a lo que más quieres por lo que piensas que deberías querer más, acabarás sintiéndote inútil.
—¿Y si lo que yo quiero no es lo que necesita la sociedad? A veces, tenemos que hacer lo que no nos gusta. Es un simple hecho de la vida, creo.
Brisa se encogió de hombros:
—Yo no me preocupo por eso. Simplemente hago aquello en lo que soy bueno. En mi caso, eso es hacer que otra gente haga las cosas que yo no quiero hacer. En el fondo, todo encaja.