Los ingresos por la prestación de servicios se reconocen cuando se cumplen las siguientes condiciones: el importe de ingresos puede ser medido confiablemente; es probable que los beneficios económicos relacionados con la transacción fluirán a la empresa; el grado de culminación de la transacción en la fecha de los estados financieros, puede ser medido fiablemente; y, los costos incurridos o a ser incurridos hasta completarlo, pueden ser medidos fiablemente.