Con palabras sencillas y ejemplos cotidianos, Pedro Antonio Reyes nos lleva de la mano por el camino de la Eucaristía. Los pasos de este caminar nos adentran en los momentos de la
celebración y nos exhortan a amar más cariñosamente nuestra fe.
El autor nos invita a conocer la celebración, a que nos transforme cabal e íntimamente, y a no abandonar nuestro camino, nuestra verdad y nuestra vida.