La sola presencia de Lori le impedía trabajar en todo lo que no fuera idear maneras de cautivar su corazón…
Lori Hanson había ido a Whitehorn para empezar una nueva vida… y no para caer enamorada de su jefe. Porque no quería volver a arriesgar su corazón, y su vida, por un hombre. Además, Josh Anderson era demasiado atractivo, demasiado bueno y… demasiado peligroso. Bueno porque se preocupaba por ella. Peligroso porque le hacía desear a ella preocuparse por él.
La tentadora recepcionista de Josh tenía secretos y miedos que la acosaban, lo que provocaba en él un deseo irresistible de acunarla en sus brazos y cuidarla. De acuerdo, no era eso todo lo que quería…