Está ok a secas. Sin negar que hay cosas positivas en su prosa, en esta novela suceden muchas cosas y ninguna tiene consecuencias tangibles para ningún personaje ni cambios significativos. Quizá ese sea el punto del autor, que las personas encerradas en rutinas tediosas son como zombies pero ni leyéndolo en pandemia me despertó nada más allá de un par de sonrisas.
Buen libro, el final se me hizo un poco flojo. Pero en general me gusto