La exportación de materias primas baratas, la importación de productos industriales caros, el control de compañías extranjeras sobre algunos de los sectores más importantes de la economía, las enormes diferencias en los niveles de riqueza, la concentración de la tierra en manos de un pequeño grupo de latifundistas, un ingreso per cápita global mucho más bajo que el de los países industrializados, un sistema educativo rezagado que daba por resultado un alto grado de analfabetismo: todos estos factores, en diverso grado, prevalecían en la mayor parte de América Latina.